Nuevo relato: "Una Leyenda Sobre Hombres-Bestia"

Para resumir, es la historia de mi personaje ( Kinne Ru Suna, la niña-loba ), es muy probable que aparezca alguno de los personajes de los otros usuarios. Ojalá les guste

Temas que me inspiraron: The mines of Narshe y Epitaph, de Final Fantasy VI / The Dragon Boy y Always with me, de Spirited Away ( El Viaje de Chihiro ) / The Promise of the World, de Howl's Moving Castle ( El Increíble Castillo Vagabundo ) / Following the wind, de Final Fantasy Unlimited / Eternal Harvest, Vammo' alla Flamenco, Endless Sorrow, You're not Alone y Rose of May, de Final Fantasy IX - Piano Collections / Fragment of Memory y Return to the Subjet, de Final Fantasy VII - Dirge of Cerberus / Does Everyone Stare, de The Police / Ahead On Our Way, de Final Fantasy V

Tema de Kineru y el cazador: Coin Song, de Final Fantasy VI


Era un día nublado de verano en la Isla Genol, esa noche llovería. Un curioso animal de pelaje celeste grisáceo se dirigía a una oscura cueva detrás de la catarata. Allí, una niña descansaba plácidamente. Pero no era una niña cualquiera, era un poderoso ente ( hermano de Shiva, por su belleza ) escondida en el cuerpo de una niña, o por lo menos eso pienso yo... Un detalle insignificante, que seguro ustedes ( curiosos Humanos, mis lectores ) querrán saber, es que tenía unas bellas orejas y una cola de Lobo Blanco. Despertó de su largo sueño después de que el animalito le lamiera la cara. Él era un cachorro de Lobo Azul de Tres Colas ( una raza poco común en la Isla Genol, pero abundante en Agroun ), y ella, una niña de apenas 13 años de una antigua raza de Hombres-Lobo, ahora extinta. Kineru ( nombre que usaré en el resto de mi relato, mezclando sus dos nombres Kinne y Ru ) apartó al cachorro de un leve empujón y miró perpleja el lugar en donde se encontraba. "¿Dónde estoy? ¿Qué pasó? ¿Cuánto tiempo?" fueron las preguntas que se hacía ella moviendo la cabeza de un lado para el otro, aún sin entender. Se paró. No recordaba nada más que a un hombre con una larga capa blanca y a ella, aterrada. Se dirigía hacia la salida de la cueva cuando escuchó al lobo gruñir. Estaba por gritarle, pero cuando se dio vuelta vio que no era a ella a quien le gruñía. Había algo detrás de la roca en la que ella apoyaba la cabeza antes, cuando aún dormía. Se asomó: un hombre de largo cabello gris-plateado, con una capa blanca, toda rasgada en las puntas... Era él, la persona que Kineru recordaba. A pesar de que el hombre estaba desmayado, la niña salió corriendo, con el cachorro detrás de ella. Estaba tan asustada, tan nerviosa, tan... ¡Confundida! que no pudo evitar caerse por la catarata. La distancia no era tanta, por lo que no sufrió gran daño. El cachorro parecía tenerle cariño, ya que se tiró después de ella y nadó hasta la orilla más cercana, a la que también Kineru había nadado... Pero, al ser un cachorro, ¡le tenía cariño a cualquiera que se le cruzase!

Empapada, Kineru caminó por un pequeño bosque hacia la aldea más cercana. Era un lindo lugar, humilde. A un costado de la entrada se encontraba el siempre presente, guardia de la aldea. Detrás de su pequeña cabaña se situaba un enorme establo de chocobos. Aquella aldea, de nombre Eiron-Eshe, era famosa por sus maravillosos chocobos. En el centro estaba la plaza, con un bellísimo manzano rodeado de bancos. Los niños solían jugar por ahí, a muchos les gustaba trepar el gran árbol, y se sentían héroes cuando llegaban a la cima. Había una herrería donde se vendían buenas armas, muchas de ellas eran exportadas a otros continentes. Pero no a Cobalt ni a Lucalvia, ya que los aldeanos de Eiron-Eshe no deseaban meterse en los conflictos de aquellos importantes lugares. Detrás de la aldea había un monte, sobre el cual se encontraba la Torre de la Bruja, una anciana alquimista que en sus tiempos había sido una poderosa Maga Roja. Ella preparaba todo tipo de pociones y enseñaba lo básico de la Magia Negra y Blanca.

Kineru se acercó al guardia y preguntó en qué continente se encontraba.

- ¡Pero que niña más rara! Encima haciendo preguntas tan extrañas -Dijo él. Kineru lo miró desentendida.
- ¡Por favor, dígame en qué continente estamos! -Rogó.
- ¡Tranquila! Estamos en la Isla Genol... Si querés saber más información, preguntale al Jefe de la pueblo -Señaló una enorme casa detrás de la plaza. Era la más grande de todas.

La niña agradeció y se fue corriendo hacia la casa del Jefe. El guardia le pegó una mirada al lobo. "Gente extraña con mascotas extrañas" pensó. Los hombres miraban desconfiados a la niña-loba y a su acompañante, las mujeres sujetaban fuerte a sus hijos para que no se acercaran a ellos. Kineru no le dio importancia, no era una persona muy sociable que digamos. El cachorro caminaba sacudiendo sus tres colas, con la lengua afuera, feliz de la vida. Atravesaron la plaza sin que nadie los interrumpiera, y llegaron a la mansión del Jefe. Ella dio tres fuertes golpes a la puerta, y con cada uno de ellos un parpadeo del lobo. Esperó unos minutos hasta que un hombre alto y de espalda ancha la abrió. La miró e, ignorando las orejas y la cola, la invitó a pasar:- ...Sin el animal -Aclaró después. Kineru atravesó la gran entrada y se internó en la mansión. Segundos después, el hombre cerró la puerta.

Un chico de al rededor de 17 años miraba fija y atentamente al cachorro. Llevaba ropa liviana, un trozo de carne en una mano, y un arco en la otra, estaba escondido detrás de una casa. Pudo ver al lobo olfateando el aire, probablemente el olor de la carne. El chico dio unos pasos hacia atrás, haciendo que el lobo lo siguiera hasta una zona despejada, detrás de la aldea. Dejó el trozo de carne en el suelo y se ocultó entre los arbustos. Mientras el animal comía, el cazador tensaba su arco. Pensaba darle la piel de ese extraño animal al Jefe del pueblo, y recibir una gran recompensa a cambio. Cuando terminó de comer, el animal desapareció. El chico, asombrado, miró por encima de su hombro. El lobo estaba justo detrás de él. Una de las peculiaridades de los Lobos Azules de Tres Colas es que se pueden teletransportar una corta distancia de no más de 20 metros. Al tener este don, y un oído más desarrollado que el de un lobo normal, estos animales no tienen problema en ser perseguidos por un cazador, aunque sea uno muy experimentado. El cachorro se lanzó sobre el muchacho y empezó a lamerle la cara.

Mientras todo esto sucedía, Kineru esperaba en el vestíbulo. No recordaba haber entrado a un lugar tan grande como aquel antes de caer en su largo sueño. Por una puerta a la izquierda, que parecía conducir a una enorme sala, apareció un hombre vestido con ropas de un nivel mayor al resto de los aldeanos y unos anteojos de apariencia antigua. Miró, sin ocultar su asombro, a la niña. Le ofreció una taza de leche, ella contestó con un NO, como si le estuviera ofreciendo veneno.

- Tu raza no es muy común por el Área de Eshe, ¿o me equivoco? -La respuesta de Kineru fue un simple negar de cabeza- Y tu compañero tampoco es de por acá, aunque hay unos pocos... ¿Para qué viniste a mi encuentro? ¿Acaso querés hospedarte en mi aldea?
- No, lo que quiero es información sobre... El Área de Eshe, y todo Genol -La miró por encima de sus anteojos, luego bebió un sorbo de té.
- Eiron-Eshe es una aldea criadora de chocobos, no hay biblioteca y la información que pueden otorgarte los aldeanos es poco y nada -Escuchó a la niña suspirar- Pero puedo darte un mapa de todo el Área de Eshe... Hay pueblos vecinos con historia de Genol y de otros continentes...
- Se lo agradecería mucho -Dijo ella con más ánimo.

El hombre la llevó a una habitación repleta de papeles, y entre ellos, mapas. Le entregó un par y la condujo hacia el vestíbulo.

Kineru salió de la casa y dio una mirada general de toda la aldea. No veía al cachorro por ninguna parte. Empezó a silbar y a chiflar, ya que no sabía el nombre del animalito. Después de poco rato, pudo divisar a un chico saliendo de detrás de una casa con el lobo al lado. Ella ya le había tomado cariño al lobo, por eso fue y enfrentó al cazador cara a cara, a pesar de que él era tres años más grande.

- ¿Planeabas matarlo? -Preguntó con tono frío y amenazador.
- Sí, esa era mi intención -a la niña le sorprendió la sinceridad con la que lo dijo- Pensaba darle la piel al Jefe, a cambio de unas cuantas monedas de oro
- ¡Jajaja! -Se echó a reír ella. No podía aguantar las carcajadas- ¡Los mejores cazadores no pueden ni tocarlo y vos planeás matarlo! ¡Ay, qué gracioso!
- A vos también planeaba matarte -Murmuró, pero no hay nada que las orejas de lobo de Kineru no puedan escuchar. La cara de la niña cambió de ser burlona e irónica, a dura y fría.
- ¿Ganarías algo con hacerlo? -Preguntó atormentándolo con sus ojos azules violáceos.
- No lo sé y no me interesa
- Yo sé que ganarías -Dijo con una sonrisa forzada- Ganarías el ser reconocido por extinguir una raza como la mía

Dio media vuelta y caminó fuera del pueblo. El lobo la siguió. El cazador quedó paralizado, nunca se imaginó que vería un lobo con tres colas, nunca se imaginó que vería a una niña con orejas y cola de lobo, nunca se imaginó que una niña le hablaría de esa forma... o eso supongo yo...

Una vez fuera de la aldea, Kineru extendió el mapa que le había entregado el Jefe. Mostraba todo el Área de Eshe y sus al rededores, un lugar bastante grande... El pueblo más cercano estaba sobre las Montañas de Shinobi. Del otro lado de ellas ya no era más el Área de Eshe, era el Área Inevento. Al localizar el lugar en el mapa de todo Genol se dieron cuenta de que una ciudad del Área Inevento estaba al lado del mar. Probablemente podrían viajar a otros continentes desde allí, y ver si encontraba a otro de su raza.



El narrador va a aparecer en la historia, pero mejor no les cuento quién es... Se van a llevar una gran sorpresa

muy buena,deberemos abrir una categoria solo para esto

Interesante

Gracias, dentro de poco el capítulo uno

Tema de la travesía: At The South Gate Border, de Final Fantasy IX / Eternal Wind, de Final Fantasy III
Temas de Minsul: Descendant of Shinobi, de Final Fantasy VII / One Danger Put Behind Us, Final Fantasy IX


Kinne Ru Suna, una niña de apenas trece años de una raza desconocida, había sido despertada de un largo sueño, sin saber la causa de éste aún, por un Lobo Azul de Tres Colas cachorro. Al despertar la pequeña cruzó un pequeño bosque para encontrarse con una aldea criadora de chocobos llamada Eiron-Eshe. Allí conoció a un joven cazador, con el que no trabó amistad ni por casualidad, y al Jefe del pueblo, quien le entregó un mapa del Área de Eshe y sus al rededores, y uno de toda la Isla Genol. Así fue como Kineru y el cachorro comenzaron la travesía en busca de los Hombres-Bestia. Se cruzaron con unos pocos Fangs y algún Duende. La raza de Kineru es portadora de poderosos poderes mentales, pero la pequeña aún no recordaba muy bien cómo utilizarlos, así que el que se encargó de las interrupciones fue el lobo.

Aún no habían llegado y se avecinaba el crepúsculo. Encima ( como predije hace no mucho ) había empezado a llover. Se ocultaron en una cueva dentro de un frondoso bosque. Al ver que a la niña le rugía el estómago, el lobo fue a cazar algún animalejo que pasara distraído. Cuando volvió, Kineru ya había prendido un fuego.

- Te agradezco mucho haberme traído algo que comer... -Estaba apunto de darle un buen mordisco al trozo de carne que había recibido, cuando vio la insatisfecha cara del animal- ¡Casi me olvidaba! También te agradezco el haberme despertado, y el haberme protegido de esos horribles monstruos que nos cruzamos allá afuera -Ahí sí, pudo comer con el lobo satisfecho.

Al día siguiente, Kineru despertó sola. No le extrañaba en lo más mínimo, los animales salvajes solían unirse a los humanos únicamente cuando les era conveniente. Se paseó por todo el bosque, buscando una salida, pero éste era muy grande y al no poder ver el sol, le costaba mucho descifrar en qué dirección iba. Empezaba a impacientarse, cuando se le apareció un extraño ser de apariencia similar al lobo, pero este era como más... ¡tierno! Pero Kineru, ¡mi poderosa Kineru! no cayó en su trampa. Sabía que era un monstruo disfrazado de cachorro, era una bestia llamada Mu de pelaje blanco y azul oscuro. Al ver que la niña no se le acercaba, el animal corrió hacia ella mostrando afilados dientes. Pero algo le impidió el paso, había un escudo invisible que rodeaba a la niña... Pero ella no había hecho nada. De repente, por detrás de una roca apareció el lobo. Ambos seres lucharon, el lobo venció al Mu sin dificultades. Luego se dirigió a Kineru y empezó a lamerle la cara. Ella le puso de nombre Nutsej-Urg, que en un idioma antiguo significa "Protector de Tres Colas". Con Nutsej ( para abreviar ) como guía y defensor, Kineru logró salir del bosque fácilmente. Esa misma tarde llegaron a las faldas de la cordillera, también conocidas como Descenso de Shinobi. No les tomaría mucho tiempo llegar al pueblo que figuraba en el mapa, así que decidieron continuar y descansar una vez llegaran. ¿Permitirán pasar a una Niña-Loba con un animal salvaje como acompañante? se preguntaba Este lugar parece más grande e importante que Eiron-Eshe, así que debo tener cuidado.

Veían de lejos al pueblo cuando a Kineru se le ocurrió tomar agua. Se pararon en un arroyo cercano. Extrañada estaba ella, ya que no encontraba por ninguna parte los mapas que le había entregado el Jefe del Eiron-Eshe. ¿Los habré olvidado en la cueva? pensó. Pero no, ella los había utilizado para orientarse y llegar al Descenso de Shinobi. Había algo muy extraño allí... ¡Cuando se puso más extraño todavía! Nutsej había empezado a gruñirle a una roca.

- ¡Ja! -Se escuchó, y desde detrás de la roca saltó una chica, aterrizando detrás de nuestros queridos aventureros. Tenía un largo cabello azul atado a una colita que le llegaba casi hasta la cintura. De bellísimos ojos celestes, y vestida con guantes y botas largos color azul oscuro y un vestido corto celeste claro, tendría al rededor de 15 años. En la mano izquierda llevaba un guante-garra, y en la derecha un abanico de filo- ¿Buscaban esto? ¡Apuesto a que sí! -Gritó desafiante.
- Necesitamos llegar al pueblo antes del anochecer... Por favor, devolvenos los mapas -Pidió Kineru, tratando de mostrarse lo más paciente posible
- ¿Qué? ¿Creés ganar tan fácilmente? ¡¡No es un juego de niños, te estoy robando!! -Chilló la chica eufórica, y un algo ofendida.
- Por si no te enteraste, soy una niña ¡Ahora devolveme los mapas! -Gritó. La ladronzuela volvió a saltar, esta vez terminando colgada de un árbol.
- ¿Querés los mapas? ¡No hasta que logres tocarme un pelo!

Kineru no pudo evitar gruñir, después de todo era mitad-loba. Pero el enojo se le fue temprano, ya que recordó a quién tenía a su lado. Miró a Nutsej, como suplicándole que haga algo. El cachorro desapareció en un parpadeo, así como la ladrona había saltado anteriormente. Ella cayó del árbol al ver al lobo aparecer al lado de ella de la nada.

- ¿Ahora sí podrías darme mis mapas? -Dijo con más tono de orden que de pedido. La ladrona trataba y trataba, pero no podía moverse- Puedo obligarte a darmelos, pero me parece más educado dejarte que lo hagas sola
- ¿¡Cómo si no puedo moverme, maldita bruja!? -Kineru la miró fijamente- ¡Dale, obligame a darte los mapas! ¿O acaso pensás soltarme? -El cuerpo de la chica se paró y caminó lenta y torpemente hacia la niña. Buscó los pergaminos robados en su cinto y los tiró al suelo. Kineru los agarró y la dejó en paz.
- Minsul Kaze Ikurume, ¿cierto? -La ladrona la miró perpleja- Una aprendiz de ninja en el Templo de Garuda, en el Bosque Inevento...
- ¿¡De dónde sacaste todo eso!? -Gritó eufórica- ¡¡Ni Orgoth, el poderoso Mago Negro de Inevento, puede leer las mentes!!
- No estoy leyendo tu mente, solo estoy visualizando tus recuerdos básicos como míos... -Se volvió hacia ella- ¿Orgoth dijiste?
- ¡¡Basta de husmear en mi cerebro!! -Minsul se agarró la cabeza y dio un gran salto hacia un árbol cercano.
- ¿Por qué robaste mis mapas? ¿Acaso te servían de algo? -Preguntó Kineru apoyándose sobre una roca. Nutsej se recostó en sus pies. La ninja no contestó- Bueno... De todas maneras no me interesaba mucho saberlo...

Se paró y comenzó a caminar hacia el norte. De repente Minsul aterrizó frente a ella.

- Sos una de esos Hombres-Bestia, por eso tenés esos poderes -Dijo con una cara más seria y temerosa que la anterior.
- ¿Una de cuáles? -No estaba muy segura, pero podrían ser de su raza.
- Unos que se hacen llamar Elfos
- ¿Elfos? -Se extrañó- No, no soy una Elfa... ¿Cómo son ellos?
- Nunca vi uno en persona, pero cuentan por los pueblos de la zona que son muy poderosos y malignos... Son asesinos, y, a veces, se alimentan de los ya asesinados por ellos -Hablaba con voz entrecortada y temerosa- Pero ahora que lo pienso, no te pareces mucho al del anuncio
- ¿Qué anuncio? -Debo investigar lo más posible sobre estos extraños seres... pensaba ...Seguro si me encuentro con uno de ellos podré saber más sobre mi raza.
- En la Ciudad de Inevento hay anuncios por todas partes "SE BUSCAN: Elfos y cualquier otro Hombre-Bestia. Avisar a la Guardia Vento" -Recordó- El del anuncio tenía orejas iguales a las de los Humanos, pero más puntiagudas, y unos colmillos largos y filosos. Daba miedo... ¡Pero no a mí, por supuesto!
- Mmm, ya que sos tan valiente... podrías hacerme un favor, ¿sabés? -Dijo Kineru con una sonrisa maliciosa mientras la otra la escuchaba atenta- Sos muy hábil e inteligente, y no parecés temerle a estos seres a los que llaman Elfos
- ¿Qué querés que haga? -Puso cara seria.
- ...Quiero que me ayudes a buscarlos -No parecía tener muchas ganas de hacerlo, así que la niña insistió- ¡Me dio mucho terror al escuchar lo que dijiste, "Asesinos que se alimentan de los cadáveres de sus víctimas"! ¡Por favor, ayudame a buscarlos!
- Está bien, pero sólo porque sos una pequeña e indefensa niña orejuda -Dijo haciéndose la difícil de convencer.

Y así partieron Minsul Kaze Ikurume, la aprendiz de Ninja, y Kinne Ru Suna, la Niña-loba, con el cachorro Nutsej-Urg... en busca de los Elfos y demás Hombres-Bestia.

Perfecto me ha encantado, espero el siguiente capítulo con ansia

Jeje, me gustó la idea de los muñequitos e hice uno de cada personaje. Este es el de Minsul:

Está muy bien n,n

Después le voy a corregir la mano izquierda, en la que en realidad tiene un guante-garra

Bién, esto se pone cada vez más interesante.

me encanto O.O en serio...
tienes un estilo y una ortografia casi perfecta O.O la historia es bien original y el modo de contar lo que ocurre envuelve al lector... no tengo palabras para describir cuanto me ha gustado ^^

Muchas gracias, Key. Me alegra que les haya gustado ^^

estamos esperando la continuacion XD

Estoy medio lerda con la historia.. pero les aseguro que dentro de poco me voy a poner con el proximo cap ^^

Está buenííísima!!! Me encantó Nutsej ^^